Dos de las personas detenidas, un hombre y una mujer, fueron los dueños del local donde la joven, que actualmente tiene 19 años, ejercía la prostitución cuando todavía era menor de edad.
Ambos fueron acusados por “ un delito continuado de trata de personas agravado por ser la víctima menor de edad en reiteración real con un delito de proxenetismo ” , según indica el comunicado de la Policía.
El otro detenido fue la pareja de la joven en el momento de los hechos, al cual se le acusa de un delito de “ contribución a la explotación sexual de personas menores de edad ” y que actualmente se encuentra en prisión por un homicidio ocurrido en 2014 en la puerta del prostíbulo donde trabajaba la chica.
Durante la investigación de los hechos la Policía tomó declaración a otras prostitutas del local y sus testimonios confirmaron que la joven trabajaba en el prostíbulo cuando todavía era menor de edad.
Por otro lado, la joven aseguró a los agentes que cuando entró a trabajar en el local los dueños le dijeron que allí trabajaban otras menores y que “ nunca había pasado nada ” , según indica el texto del comunicado.
Los dueños del local fueron condenados a prisión mientras que a la expareja de la joven se le aumentó la pena de cárcel que ya está cumpliendo.
Los tres detenidos contaban con antecedentes penales previos, entre ellos el de venta de estupefacientes. Las investigaciones del caso fueron llevadas a cabo de forma conjunta entre el Departamento de Investigaciones Especiales de la Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado de la Policía uruguaya y la Interpol.