Los disparos, muy cercanos al centro, comenzaron a intensificarse hacia las 02:00 (20:00 del sábado en Paraguay), y continuaban con la misma fuerza y regularidad dos horas más tarde.
Esta acción militar sin precedentes desde el alto al fuego firmado el 5 de setiembre tiene lugar después de que la OSCE indicara, el sábado de noche, que sus observadores vieron llegar a Donetsk importantes refuerzos para los rebeldes prorrusos, consistentes en unos 40 tanques y una veintena de camiones que trasladaban cañones de 120 mm.
No fue posible en lo inmediato evaluar las consecuencias de estos bombardeos, a causa del toque de queda impuesto en Donetsk por las autoridades separatistas entre las 23:00 y las 06:00 locales.
Violentos bombardeos continuaban en la zona del aeropuerto, al norte de Donetsk, epicentro de los combates entre los rebeldes y las fuerzas armadas ucranianas desde hace varios meses.