El montañista mexicano Rubén Jaén fue hallado con vida el jueves, sumándose así a los dos españoles Xavier Gualarte Peiro y Marc Veza Rodiño y a los dos guías peruanos Santiago Cochachin Albino y Marino Caldúa Milla.
Estos habían sido auxiliados el miércoles por la policía de Alta Montaña de Huaraz (noreste) ciudad cercana al nevado.
El mexicano Rubén Jaen se salvó de milagro al quedar colgado de su arnés en la boca de la grieta donde cayeron varios de sus compañeros tras la avalancha. Unos alpinistas australianos lo hallaron y lo llevaron a un refugio, donde se recupera, según la radioemisora RPP.
El accidente ocurrió la mañana de martes en una zona conocida como la ’Canaleta’ o la ’Garganta’, a unos 5.800 metros de altura, adonde los socorristas llegaron tres horas después de la avalancha, informaron las autoridades.
Hasta la mañana del jueves, según detalló la policía, permanecían desaparecidos los mexicanos José Miguel Mendoza de 44 años y Carlos Belkosky de 45, y los guías peruanos Julio Suárez y Gilberto Loli. Sin embargo, la Casa de Guías de Huaraz informó a la AFP del hallazgo sin vida de tres de ellos, aunque no se ha detallado sus identidades.
“Estos tres cuerpos ya fueron rescatados. Los brigadistas los están bajando a la casa de refugio. Sólo queda un cuerpo que cayó a la grieta y un grupo trabaja para hallarlo” , explicó Julio Maguiña, funcionario de la casa de guías en Huaraz.
“Quedaron sepultados. En la zona siguen cayendo bloques de hielo y eso hace el trabajo muy arriesgado” , dijo a la AFP el oficial Pavel Orellana de la Unidad de Salvamento de Alta Montaña de la Policía.
Orellana señaló que gran la masa de hielo que cayó en lugar del accidente equivale a “la extensión de dos estadios de fútbol” . En la zona se encuentran una decena agentes con apoyo de rescatistas de la Asociación de Guías de Montañas del Perú (AGMP) .
El presidente de la AGMP, Rafael Figueroa Chávez, explicó a la prensa que el incidente ya fue comunicado a las embajadas respectivas.
En agosto de 2015, tres turistas ecuatorianos se extraviaron cuando escalaban una de las paredes de la sección sur del nevado Huascarán. Sus cuerpos fueron hallados cuatro días después.
El Huascarán es un macizo ubicado en la cordillera occidental de los Andes peruanos y es el nevado del país más visitado por los alpinistas extranjeros.