“Taiwán es Taiwán y nunca ha sido gobernado por China”, destacó un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores isleño, en el día en que se llegaba a la fecha límite dada por Pekín a las aerolíneas para ceder a sus exigencias.
Taiwán tachó la intervención china de “grosera” e hizo un llamamiento a los países democráticos para que no cedan ante los “actos hegemónicos de China, que pretenden inmiscuirse en la soberanía de empresas extranjeras independientes”.
Desde el 25 de abril de este año, China ha escrito a 44 aerolíneas pidiendo que con fecha límite del 25 de julio cambiaran la designación de Taiwán y dejaran claro que era parte del territorio chino, bajo la amenaza de tomar “medidas adicionales” para las que no cumplieran con estas demandas.
Todas esas aerolíneas han dejado de colocar a Taiwán en la lista de Estados independientes -las últimas seis lo hicieron hoy-, pero algunas han optado por colocar todos los países y territorios juntos sin designar a los aeropuertos taiwaneses como aeropuertos de China.