El presunto terrorista ha sido identificado por los medios franceses como un joven de 20 años y origen marroquí, gracias a sus huellas dactilares, ya que podría tener antecedentes por robo, si bien las autoridades no han confirmado oficialmente hasta el momento su identidad.
Según esos medios, el hombre había sido arrestado en 2013 en el departamento meridional de Var por robo y entonces aseguró que se llamaba Sallah Ali, que no tenía domicilio fijo y que había nacido en Casablanca (Marruecos) en 1995.
La policía encontró en su cadáver un papel con un emblema del EI en el que supuestamente juraba lealtad a través, de un manuscrito, a Al Bagdadi.
De acuerdo con la Fiscalía, que ha abierto una investigación por terrorismo, el hombre gritó “ Allahu akbar ” ("Dios es el más grande") y mostró un cuchillo de carnicero, antes de que los policías que custodiaban la entrada a la comisaría del barrio de la Goutte d'Or abrieran fuego sobre él.
Aunque al principio se temió que el hombre llevase un cinturón de explosivos, finalmente se descubrió que se trataba de una bolsa de la que salían unos cables.
La ministra francesa de Justicia, Christiane Taubira, alertó en declaraciones en el canal “ iTélé ” de la posibilidad de que el individuo fuese un desequilibrado, sin contacto con redes yihadistas.