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La frontera fue cerrada en 2011 en un deterioro de las relaciones después de que el sur se independizara tras un largo conflicto civil y se quedara con reservas probadas de petróleo de 5.000 millones de barriles, de acuerdo a estimaciones de una agencia estadounidense.
"El presidente Omar al Bashir lanzó un decreto ordenando la apertura de las fronteras con el estado de Sudán del Sur y ordenó a las autoridades competentes que tomaran todas las medidas para implementar la decisión en el terreno", dijo la agencia estatal SUNA.
El portavoz del gobierno sursudanés Michael Makuei Lueth dijo que la reapertura incrementará los lazos económicos entre los vecinos. "Es un movimiento positivo y en la dirección correcta porque llevará a la normalización de nuestras relaciones", dijo a Reuters.
Jartum acusa a Yuba, capital de Sudán del Sur, de respaldar la rebelión en la región de Darfur y también le vincula a la insurgencia en las zonas del Nilo Azul y Sur Kordofan, unas acusaciones que los vecinos del sur niegan.
El presidente sursudanés Salva Kiir anunció el martes de forma inesperada y unilateral la normalización de las relaciones en respuesta a la acuerdo con Al Bashir recortar los impuestos de tránsito del petróleo del sur en los oleoductos del norte.