MIAMI. La Demo Mission-1 (DM-1) es un “vuelo de prueba sin tripulación a bordo” que probará a los astronautas la capacidad de SpaceX para viajar de forma “segura y confiable hacia y desde la EEI”, como parte del programa de tripulación comercial de la NASA, resalta la compañía en su página web.
La cápsula Crew Dragon, una versión mejorada del módulo de carga Dragon, despegará mañana desde la histórica plataforma 39A del complejo de Cabo Cañaveral (Florida), la misma del lanzamiento de las misiones lunares del programa Apolo.
Este nuevo módulo espacial cuenta con nuevos sistemas de soporte de vida para la tripulación, paneles de control de la nave, diseño de asientos y un sistema de propulsión que puede usarse en caso de emergencia en el lanzamiento para poner a salvo a la tripulación.
El lanzamiento tendrá lugar a las 2:49 hora local (7:49 GMT) del sábado y, “tras la separación en etapas, SpaceX intentará que aterrice la primera fase del cohete Falcon 9” en la plataforma llamada “Por supuesto que todavía te quiero”, situada en el Atlántico.
Bajo un contrato con la NASA por el que recibirá 2.600 millones de dólares, el plan de SpaceX en esta primera fase es llevar a cabo un vuelo de prueba sin tripulantes, pero que llevará suministros a los astronautas que se encuentran en la estación espacial.
Si todo va según lo previsto, en abril próximo SpaceX llevará a cabo un nuevo test de vuelo para probar un sistema de emergencia y, meses más tarde, en verano, transportará por primera vez a dos astronautas de la NASA a la estación espacial, donde permanecerán dos semanas.
“Mientras se prepara a Dragon para el traslado de seres humanos por primera vez, SpaceX continuará haciendo viajes regulares a la EEI con suministros y carga”, señala la compañía aeroespacial fundada por Elon Musk.
SpaceX destacó que, “actualmente”, la Dragon es la “única nave espacial que puede traer de regreso a la Tierra una gran cantidad de carga”.