“No hay órdenes de retirar nada”, dijo al Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes el general Joseph Votel.
“Las condiciones políticas en las que estamos en la reconciliación no ameritan ahora mismo la retirada”, manifestó.
Tras 17 años, Trump quiere poner fin a la participación estadounidense en Afganistán, donde todavía hay 14.000 soldados.
Pero Votel aseguró que a pesar de algunas señales positivas en las conversaciones entre Estados Unidos y los talibanes, aún no se ha progresado lo suficiente.
Uno de los problemas, remarcó, es que los talibanes son reacios a negociar directamente con el Gobierno afgano.
Además, las fuerzas afganas no están aún preparadas para ser independientes, afirmó.
“Mi consejo es que cualquier decisión para reducir las fuerzas en Afganistán debería ser tomada consultando a nuestros socios de la coalición y, por supuesto, al Gobierno de Afganistán”.
“La fuerzas afganas dependen del apoyo de la coalición que les brindamos”, añadió Votel.