Un segundo grupo de evacuados, que incluye a 3.708 combatientes del grupo islamista Legión de la Misericordia, junto a sus parientes y otros civiles, se prepara para salir de Guta Oriental, según la agencia oficial de noticias siria, SANA.
Cincuenta y dos autobuses están en la localidad de Arbín para proceder a la evacuación de los rebeldes que han rechazado permanecer en sus localidades, las cuales pasan a estar ahora bajo el control de Damasco tras un mes de ofensiva.
El acuerdo entre los opositores y las autoridades establece que los combatientes entreguen sus armas pesadas y medianas y abandonen esta zona hacia Idleb, importante bastión rebelde controlado casi totalmente por el Organismo de Liberación del Levante (exfilial siria de Al Qaeda). Asimismo, contempla que las personas que necesiten asistencia médica sean trasladadas a hospitales por la Media Luna Roja Siria y luego puedan elegir si regresan a Guta Oriental o si se marchan a Idleb.
Rusia es el garante de que se cumpla esta y otras condiciones del pacto, el segundo alcanzado esta semana en la región.
Anoche salió un primer grupo de evacuados, con cerca de 1.000 combatientes de la Legión de la Misericordia, familiares y civiles a bordo de varios autobuses. El convoy llegó hoy a la zona de Qalaet al Madiq, en el noroeste de Hama, y está previsto que siga su camino hacia la provincia de Idleb, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La agencia SANA precisó que este pacto con las autoridades es similar al que se produjo en Harasta, localidad declarada “libre de terroristas” después de que la última caravana de autobuses abandonara hace dos días la población tras un acuerdo entre Damasco y el grupo Movimiento Islámico de los Libres de Sham. Por su parte, el Observatorio destacó que, tras la evacuación del último grupo de hombres armados, los llamados Libres de Sham ya no tienen presencia en Guta Oriental, como se espera ahora que suceda con la Legión de la Misericordia.
Los combatientes dejaron Harasta en dirección a Idleb, según el Observatorio. De esta forma, el Ejército sirio se ha hecho con el control del 90 por ciento del territorio de la región, en la ofensiva gubernamental en el área que comenzó el pasado 25 de febrero.
Por otro lado, unos 800 civiles dejaron hoy sus hogares en Duma, la ciudad más grande de Guta y en manos de la facción Ejército del Islam, señaló el Observatorio. Estas personas salieron a través del paso abierto por las fuerzas gubernamentales sirias en el campo de refugiados palestinos de Al Wafidín hacia el norte del país, indicó la ONG, que no precisó el lugar exacto.
El Ejército del Islam, uno de los grupos islamistas que operan en Guta Oriental, y Rusia, aliada del Gobierno de Damasco, alcanzaron un acuerdo la semana pasada para que los civiles, los enfermos y los heridos que lo desearan pudieran marcharse de Duma a través del corredor habilitado por el Ejército sirio.
Tras la evacuación y el alto el fuego en las zonas controladas por la Legión de la Misericordia, los equipos de rescate han procedido a recuperar los cadáveres que quedaron bajo los escombros después de los intensos bombardeos lanzados por las fuerzas del régimen sirio y sus aliados.
El Observatorio aseguró hoy que se han recuperado al menos 44 cadáveres de civiles -la gran mayoría de una misma familia- en la localidad de Arbín y que murieron por un ataque aéreo lanzado el 22 de marzo.
Entre los fallecidos, hay diecisiete menores, trece mujeres -de ellas tres embarazadas- y catorce hombres, puntualizó la ONG. Con estas víctimas mortales, el Observatorio aumentó a 1.644 las personas que han perdido la vida en Guta Oriental desde el pasado 18 de febrero, cuando comenzó la escalada de violencia en la región, entre ellas 344 menores y 213 mujeres.