Los turistas se encontraban de vacaciones y habían arrendado un departamento en el centro de Santiago donde sufrieron malestares físicos, por lo cual pidieron ayuda al cónsul brasileño en Chile, quien junto a efectivos de la Policía, llegó al lugar.
Una vez allí tuvieron que ingresar a la fuerza y se encontraron con los cuerpos. “Pudimos constatar que existían seis personas fallecidas, cuatro adultos y dos menores, y que posiblemente su muerte se habría originado por emanación de gas”, dijo el comandante Rodrigo Soto a medios locales.
Efectivos de bomberos efectuaron una evacuación inmediata del edificio, luego realizaron mediciones del aire en el departamento y descubrieron altas concentraciones de monóxido de carbono, un gas que no emite olor y cuya inhalación provoca la muerte.
Los seis turistas brasileños se encontraban en Chile desde hacía una semana, y el departamento lo habían arrendado mediante una aplicación de internet. Cuando la Policía ingresó al departamento notaron que todas las ventanas estaban cerradas lo cual habría provocado la gran concentración de gas, explicó Soto.
La Policía cerró las calles adyacentes al edificio e inició una investigación para confirmar las causas de la muerte de los extranjeros, mientras que bomberos realizaba una exhaustiva búsqueda de posibles fugas de gas en el lugar.