Sangdhak Tsering, padre de un niño de tres años, se inmoló el sábado poco después de que lo hiciera una mujer en esta región para protestar contra la política china en Tíbet.
Estos casos elevan el número total de inmolados en Tíbet a 14 desde el 7 de noviembre, víspera del inicio del congreso del Partido Comunista Chino (PCC) que designó a los nuevos dirigentes del país.
“Sangdhak Tsering decía repetidamente a su mujer que no servía de nada vivir en Tíbet si no tenían libertad”, señala el comunicado del gobierno en el exilio, que tiene su sede en la ciudad india de Dharamsala desde la huida del Dalai Lama en 1959.