“La chica tenía quemaduras en más del cincuenta por ciento de su cuerpo y en las vías respiratorias”, señaló la portavoz del hospital Sf. Pantelimon, Fiorella Mitoiu.
Por otra parte, los tres dueños de la discoteca fueron arrestados de forma cautelar durante 24 horas, acusados de homicidio involuntario, informó ayer la Fiscalía rumana.
Algunos testigos aseguraron que en la discoteca Colectiv, en la que se estaba celebrando un concierto cuando ocurrió la tragedia, no existían salidas de incendio y que se habían utilizado materiales inflamables para insonorizar el local.
Fue durante un concierto en este local, que carecía de permiso para organizar espectáculos, cuando un artefacto pirotécnico lanzó chispas sobre la almohadilla de protección de un pilar, que comenzó a arder.
Las autoridades temen que el número de muertos pueda aumentar, ya que 90 de los heridos siguen en estado crítico. Además de presentar graves quemaduras, muchos de ellos han sufrido lesiones provocadas por la avalancha humana y otros inhalaron gases tóxicos.