Cumpliendo la orden de un juez, es la primera persona que regresa desde que entró en vigencia el polémico decreto, que suspende además por 120 días la entrada de refugiados.
Ali Vayeghan tenía 12 años esperando para inmigrar con su familia a Estados Unidos. Los recibió en Los Ángeles su hermano y sobrina bajo cánticos de “¡esta es tu tierra!"
“Así luce la humanidad” , expresó en farsi el hombre de 61 años, mientras su sobrina traducía. “A esto se parecen los derechos humanos, estoy en choque, honrado y conmovido. ¡Este es el país más maravilloso del mundo!” , añadió asegurando que no guarda ningún tipo de rencor.
Vayeghan, que tenía un permiso de residencia (la llamada “green card") fue enviado en un vuelo a Dubái después de llegar a Los Ángeles el viernes, poco después del decreto de Trump, que prohíbe por 90 días la entrada a personas provenientes de Siria, Yemen, Libia, Irak, Somalia y Sudán, además de Irán.
Abogados de inmigración y una organización defensora de los derechos civiles consiguieron que un juez ordenara que se le permitiera acceso y le facilitara su regreso.
Las autoridades aclararon después que la medida no aplicaba a quienes tuvieran una “green card” .