Putin “agradeció” las informaciones que permitieron “seguir la pista, descubrir y arrestar a un grupo terrorista que preparaba” atentados en la segunda ciudad de Rusia, según un comunicado del Kremlin.
“Las informaciones recibidas por la CIA resultaron suficientes” para lograrlo, apuntó. Según su comunicado, los terroristas preveían “explosiones (de ingenios) en la catedral de Nuestra Señora de Kazán y otros lugares muy frecuentados de la ciudad”.
Los servicios de inteligencia rusos (FSB) anunciaron el viernes que habían desmantelado una célula del grupo yihadista Estado Islámico (EI) que se disponía a cometer atentados el 16 de diciembre en San Petersburgo.
En total fueron arrestadas siete personas entre el miércoles y el jueves. El FSB precisó que se incautó de “una gran cantidad de explosivos destinados a fabricar dispositivos artesanales, armas automáticas y municiones”, y que el grupo planificaba un “atentado suicida”, y “matanzas y explosiones en lugares muy transitados” de San Petersburgo.
Durante su conversación telefónica, Putin pidió a Trump “transmitir su agradecimiento al director de la CIA y al personal operativo de los servicios de inteligencia estadounidenses”.
El presidente ruso añadió que “si los servicios especiales rusos reciben informaciones sobre riesgo terrorista en relación con Estados Unidos y sus ciudadanos, los transmitirán inmediatamente a sus pares norteamericanos”.
Rusia ha sufrido varios atentados este año. En uno de ellos, en abril en el metro de San Petersburgo, murieron 14 personas. A los servicios de inteligencia rusos les preocupa el retorno de los yihadistas que combatieron en Siria, donde el grupo EI perdió sus principales posiciones, gracias entre otras cosas al apoyo de Rusia al régimen de Bashar al Asad.