“Hablarán sin duda sobre este tema”, aseguró a los periodistas el consejero del Kremlin, Yuri Ushakov, aunque recordó que “el objetivo principal de este encuentro será la mejora de las relaciones entre Rusia y Arabia Saudita”.
Durante un foro económico en Moscú, Putin se felicitó este miércoles por la cooperación entre Rusia y la OPEP (Organización de los Países Exportadores de Petróleo), integrada por Arabia Saudita, entre otros países.
“Hemos trabajado con los países de la OPEP (...) para equilibrar la oferta y la demanda (de crudo). Por primera vez en la historia de esta organización, hemos logrado que se apliquen el 100% de los acuerdos”, afirmó el presidente ruso.
“Tengo que reconocer que esto resultó posible en parte gracias a la posición de Arabia Saudita (...) y del príncipe heredero, que fue el precursor”, añadió.
A diferencia de los gobiernos europeos, que condenaron el asesinato de Khashoggi, Moscú mantuvo una posición más tibia.
El Kremlin aseguró a finales de octubre que no encontraba ningún motivo para “no creer” la versión de la familia real saudita.
Khashoggi, colaborador con el Washington Post y crítico con el régimen saudita, fue asesinado el 2 de octubre en el consulado de su país en Estambul.
Tras haber negado inicialmente la desaparición del periodista y dado versiones contradictorias de los hechos, las autoridades sauditas reconocieron el asesinato del periodista en el marco de una “operación no autorizada”.