“Confirmamos que se inició el procesamiento penal por falsificación y estafa el 26 de mayo de Radu Pricop y de otras doce personas”, indició la oficina de prensa de la Fiscalía a la AFP.
Según los medios de comunicación, la justicia sospecha de que Pricop, abogado, utilizó documentos falsos en un juicio para conseguir una compensación por una propiedad confiscada por el régimen comunista.
Pricop y su asociado, que compraron los derechos litigiosos de esta propiedad, habrían conseguido unos 10 millones de euros. El abogado admitió a la prensa que un “error” afectaba a parte de los documentos, pero que esto no había influido en el desarrollo del juicio.
Este caso es un nuevo golpe para el jefe de Estado, tras el escándalo en el que está implicado su hermano Mircea Basescu.
Este está acusado de haber aceptado 250.000 euros par intervenir a favor de una figura del mundo criminal, Sandu Anghel, acusado de tentativa de asesinato.
Anghel fue condenado en mayo a ocho años y nueve meses de cárcel.
El lunes, el presidente Basescu excluyó dimitir al considerar que no tenía nada que reprocharse. Preguntado por la situación de su yerno, indicó que “todos los rumanos deben responder ante la justicia”.