El Gobierno taiwanés “estaría dispuesto a hacer todo lo que pueda ayudar (...) a la paz y la estabilidad”, declaró Tsai Ing-wen al ser preguntada si preveía encontrarse con su homólogo chino, a la vista del resultado positivo de la cumbre entre las dos Coreas este viernes.
La reunión con Xi Jinping podría tener lugar “sin condición política previa y sobre una base de igualdad”, añadió. En estas condiciones, “creo que ningún dirigente taiwanés se negaría”, consideró.
China continental y Taiwán están dirigidas por gobiernos rivales desde el fin de la guerra civil china, en 1949. La isla se gestiona de manera autónoma, pero nunca declaró su independencia. Pekín sigue considerándola parte integrante de China y no excluyó retomarla por la fuerza si hubiera una declaración de independencia.
El presidente Xi Jinping repitió en marzo que su país no aceptaría “jamás” la retirada de un solo centímetro de su territorio.