“Cualquier intento por parte de fuerzas exteriores de deponer a un presidente legítimamente electo de acuerdo a la Constitución de un Estado soberano es una injerencia evidente en asuntos internos y una flagrante violación del derecho internacional”, dijo un portavoz del Ministerio de Exteriores en un mensaje remitido a KCNA.
La Cancillería norcoreana considera que la “situación anormal” que atraviesa Venezuela tras la autoproclamación el 23 de enero del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como presidente interno tras dar por nulo el resultado de las elecciones de mayo de 2018, “se está convirtiendo en un asunto internacional complicado”.
Muestra de ello, dijo, fue la convocatoria tras días después de una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU. “Nuestra firme postura es que los problemas de Venezuela deben resolverse de manera pacífica de acuerdo a la voluntad y decisión independientes del Gobierno y el pueblo venezolanos”, señaló Exteriores en el texto difundido la noche del domingo.