El vicepresidente de la cámara empresarial del sector, Fernando Browlin, dijo que el paro afectó en ambas jornadas a unos 80.000 pasajeros que iban a desplazarse a distintos puntos de Argentina y a los países limítrofes (Uruguay, Bolivia, Chile, Paraguay y Brasil).
“Estamos muy preocupados porque en cuatro meses de negociaciones paritarias (discusión salarial) hemos asistido a 20 reuniones y la situación de los trabajadores no se resuelve”, dijo a radio Vórterix Roberto Fernández, titular del gremio Unión Tranviarios Automotor (UTA), que nuclea a unos 22.000 choferes.
Fernández ratificó la continuidad del paro general del transporte de larga distancia iniciado a las 14:00 locales del jueves, a la espera de una reunión clave con los empresarios en el ministerio de Trabajo prevista para la tarde del viernes.
“Ni bien tengamos una respuesta, el paro se levanta”, afirmó el dirigente gremial, tras haber fracasado el jueves una reunión con la mediación del ministerio de Trabajo.
El dirigente sindical explicó que reclaman “un 23% de aumento retroactivo a enero”, en sintonía con el ajuste salarial logrado por los conductores de los buses de corta distancia (locales) , mientras se llevan a cabo otras paritarias en diversos sectores de actividad.
La inflación en Argentina fue de 10,8% en 2012, según cuestionadas cifras oficiales, pero las discusiones sobre ajuste salarial se basan en el alza del costo de vida que las consultoras privadas estimaron en 25,6%, lo que lo convertiría en el más alto de América Latina.