Papa designa un asesor especial para vigilar a los Legionarios de Cristo

VATICANO. El papa Francisco designó al jesuita italiano Gianfranco Ghirlanda como “asistente” de la controvertida congregación Legionarios de Cristo, empeñada en limpiar su pasado marcado por la pedofilia de su fundador, el mexicano Marcial Maciel.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074

El “asistente” pontificio, de 71 años, experto en derecho canónico, deberá asesorar en forma especial a la entidad para que rectifique varios puntos de los nuevos estatutos adoptados a inicios de es este año por la poderosa congregación, presente en 22 países, entre ellos numerosos de América Latina. El nombramiento del nuevo asesor fue anunciado la noche del jueves durante una reunión en Roma entre el prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica , el cardenal brasileño João Braz de Aviz y el nuevo director general de los Legionarios, el religioso mexicano Eduardo Robles-Gil.

“Deberá ayudar a los Legionarios a superar definitivamente la difícil crisis institucional vivida en los últimos años”, subraya en un comunicado la congregación religiosa. El Vaticano recalcó, por su parte, que se trata de un “asistente”, una suerte de consejero y no de un comisario, ya que no tendrá derecho a votar, aunque participará en las reuniones del Consejo Superior de la congregación.

El asesor tiene como principal tarea la de rectificar para que resulte “más explícitos” dos puntos importantes de los nuevos estatutos: la referencia al Concilio Vaticano II (1962-1965), la asamblea que modernizó a la Iglesia a mediados del siglo XX, y los lazos entre los Legionarios y el influyente movimiento laico Regnum Cristi. “Los miembros del gobierno general acogemos con gratitud la ayuda que la Iglesia nos ofrece a través del padre Ghirlanda. Nos llena de confianza su experiencia y sus capacidades personales, así como el conocimiento que ya tiene de la Legión y el Regnum Christi al haber sido consejero personal del Delegado Pontificio”, comentó Robles-Gil citado por el comunicado de los Legionarios.

La congregación conservadora, fundada en 1941, logró por décadas ocultar las denuncias contra Maciel y contó con la protección de altos jerarcas del Vaticano durante el pontificado de Juan Pablo II (1978-2005), quien consideraba a los legionarios un ejemplo de virtud católica. Con una petición colectiva de “perdón” por “los comportamientos graves y objetivamente inmorales” cometidos por Maciel, pronunciada a través de un comunicado divulgado en febrero pasado en Roma tras una serie de reuniones extraordinarias, el movimiento, presente en casi toda América Latina, intentó “iniciar una nueva etapa” después de estar al borde de la disolución por haber protagonizado uno de los mayores escándalos de la Iglesia.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...