JERUSALÉN (EFE). Además de los fuegos en campos de cultivo y bosques, ayer la Policía desactivó un artefacto explosivo que llegó a territorio israelí atado a un globo de helio que aterrizó en una carretera principal de la región de Shaar Haneguev, según informó su portavoz.
Hamás amenazó con enviar 5.000 cometas incendiarias y globos explosivos contra Israel, pero ayer no se materializó todo el ataque.
La radio nacional israelí Kan sugirió que podría deberse a que los palestinos estaban dedicados a celebrar el Aíd al Fitr, el festivo de tres días que marca el fin del ayuno del mes sagrado islámico del Ramadán, en el que es tradición hacer visitas familiares, celebrar comidas festivas y los niños reciben regalos y dulces.
En respuesta a los ataques, ayer, habitantes de una población israelí especialmente afectada por la oleada de incendios provocados por los palestinos, lanzaron globos de helio con dulces atados en dirección a la Franja de Gaza.
El mismo telediario informó de que Israel usó por primera vez un nuevo radar, inicialmente diseñado para detectar alas delta –utilizadas por los grupos armados palestinos a finales de los años ochenta– recalibrados para localizar cometas y globos.
Una vez detectados, el Ejército israelí los interceptó con drones. El viernes el Ejército efectuó disparos de advertencia a un grupo de palestinos en Gaza que intentaban lanzar globos incendiarios.
La prensa local destaca que los disparos de advertencia parecen ser una nueva táctica militar para combatir la amenaza que suponen las cometas y los globos, que se lanzan casi a diario desde la Franja desde que comenzaron las protestas el 30 de marzo y que han quemado hasta ahora más de 1.800 hectáreas de plantaciones agrícolas, bosques y campos, provocando daños de más de un millón y medio de dólares.
El Ejército ha logrado neutralizar en el aire más de 500 de estos artefactos con drones.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció recientemente que descontará el coste de los daños del dinero que Israel recauda en impuestos en nombre de la Autoridad Nacional Palestina, según los Acuerdos de Paz de Oslo.