En un informe elaborado tras una investigación realizada del 14 al 22 de marzo de 2018, ese organismo señala que esos enterramientos se han encontrado en el territorio de Djugu, en la provincia de Ituri. La investigación se efectuó en “el contexto de la violencia interétnica” entre las comunidades Lendu (etnia agricultora) y Hema (ganadera).
Desde diciembre de 2017, durante 56 incidentes, al menos 263 personas, incluidas 91 mujeres, fueron asesinadas, otras 29 resultaron heridas y 120 localidades y aldeas fueron saqueadas y destruidos, según la ONU.
“La mayoría de las víctimas pertenecen al grupo étnico Hema”, dice la ACNUDH, al concluir que su equipo investigador “ha identificado cinco posibles fosas comunes”.
Varias localidades en el territorio de Djugu, recuerda el comunicado, están experimentando una escalada de violencia entre estas dos comunidades que ha provocado desplazamientos masivos de gente a otras poblaciones congoleñas y Uganda.
En los últimos meses se ha recrudecido el llamado conflicto de Ituri, que enfrenta a ambas etnias desde hace más de dos décadas, con un balance de más de 50.000 muertos, aunque en los últimos años estas disputas se habían reducido. Estas comunidades tienen fricciones constantes por las tierras y por el ganado.
La RDC está inmersa en un frágil proceso de paz tras la segunda guerra del Congo (1998-2003), que implicó a varios países africanos. La Misión de Paz de la ONU en la República Democrática del Congo (MONUSCO) tiene desplegados en el país más de 20.000 efectivos de más de cuarenta naciones.