Cargando...
El mandatario, acompañado de su esposa, Michelle, y sus hijas, Malia y Sasha, cruzó el puente junto con el expresidente George W.
Bush y su esposa, Laura, y algunos de los activistas que participaron en la marcha en 1965,como el ahora congresista demócrata John Lewis, de 75 años.
Obama, que ya visitó Selma como candidato presidencial en 2007 cuando todavía era senador por Illinois, inició el recorrido después de recordar en un discurso ante 40.000 personas que la “larga sombra” del racismo está todavía presente en EE.UU.
El fiscal general, Eric Holder, el primer negro en ocupar ese cargo, también participó en el cruce conmemorativo junto con su esposa, y otros altos funcionarios como la asesora de seguridad nacional del presidente de EE.UU. Susan Rice.
El grupo, compuesto por más de 50 personas, caminó con paso lento agarrado del brazo mientras avanzaban hacia la característica estructura metálica en forma de arco del puente y cruzaron por encima del río Alabama cantando “Keep your eyes on the prize”, un himno del movimiento de los derechos civiles.
El congresista demócrata John Lewis, uno de los heridos en aquella marcha, en la que participó con tan solo 25 años, contó al presidente y la primera dama algunos de sus recuerdos de aquella histórica jornada que como dijo en la ceremonia previa, “cambió el país para siempre”.
Antes de llegar al final del puente, Obama intercambió unas palabras con Amelia Boynton Robinson, de 103 años, líder del movimiento civil de Selma en los años sesenta y quien también participó y resultó herida en la marcha.
“Qué extraordinario honor ha sido (estar aquí), especialmente para Shasha y Malia”, dijo el mandatario, que en su discurso hizo un guiño a los jóvenes sobre su poder para incitar el cambio.
La familia Obama visitó posteriormente el Museo Nacional de los Derechos de Voto, en el que se exponen fotos en blanco y negro sobre los eventos de 1965 y objetos personales de quienes participaron, así como material original de la campaña de derecho al voto.