Los manifestantes formaron un cordón frente a los uniformados. Según un tweet de la policía de fueron detenidos quienes “desafiaron la orden de abandonar la protesta tras la entrada en vigor del toque de queda”, que rige por cuarta noche consecutiva.
Los manifestantes reclaman “justicia para Freddie Gray”, de 25 años, muerto como consecuencia de una “herida grave” tras su detención el 12 de abril.
Tras el fallecimiento Baltimore ha sido teatro de manifestaciones cotidianas que el lunes se transformaron en violentos disturbios.
Más temprano este viernes la Fiscalía de Baltimore anunció que presentará cargos criminales contra seis policías por la muerte de Gray, desatando expresiones de júbilo.
Hacia fines de la tarde, cuando los policías encargados de vigilar la manifestación se acercaban, algunos manifestantes les increparon: “policías a la cárcel. Toda esta porquería de sistema es culpable”. “Paren ya la ocupación de Baltimore”, gritó otro.
Más de un millar de personas se habían manifestado en la tarde en Nueva York, donde 143 personas fueron detenidas el jueves tras una protesta similar.
La fiscal de Baltimore Marilyn Mosby (una mujer negra que se presentó como hija y nieta de agentes policiales), había adelantado anteriormente que su oficina había emitido órdenes de arresto contra los seis policías implicados.
“Los resultados de nuestra amplia investigación independiente, sumados al informe del examen médico que determinó que la muerte del Sr. Freddie Gray fue un homicidio, nos llevan a la convicción de que tenemos causas probables para presentar cargos criminales”, dijo Mosby en conferencia de prensa.
Los agentes deberán responder por cargos como homicidio en segundo grado, homicidio involuntario, lesiones corporales graves y arresto irregular.
Un abogado del sindicato de policías de Baltimore, Michael Davey, condenó la rapidez de la fiscalía. “Nunca he visto semejante prisa para presentar cargos criminales” , dijo, y expresó su convicción de que “estos agentes serán absueltos ya que no han hecho nada malo” .
El presidente Barack Obama dijo que consideraba “absolutamente vital” que las pesquisas lleguen al fondo del episodio. “Debe hacerse justicia” , añadió.
“Los habitantes de Baltimore quieren, más que cualquier otra cosa, la verdad. Es también lo que todos esperan en todo el país” , recalcó el mandatario.
En tanto, la alcaldesa de Baltimore, Stephanie Rawlings-Blake, dijo a la prensa que cinco de los seis agentes involucrados ya están bajo detenidos.
De acuerdo con Mosby, los agentes “arrestaron ilegalmente” a Gray ya que “no se había cometido ningún crimen”.
Para la fiscal, los agentes no tenían ningún elemento concreto para proceder al arresto de Gray e ignoraron reiteradamente sus pedidos de atención médica.
Gray, dijo Mosby, “sufrió heridas severas y críticas en el cuello como resultado de la operación para esposarlo y controlarlo” dentro del automóvil policial.
La patrulla que transportó a Gray a una comisaría realizó tres paradas en su trayecto y en una de esas oportunidades los agentes subieron a otro joven, sospechoso en otro caso no relacionado.
El oficial que conducía la camioneta, Caesar Goodsen, llegó a verificar el estado de Gray “pero en ningún momento atendió a sus pedidos de ayuda médica”, dijo la fiscal.
La sargento de policía Alicia White, en tanto, percibió que Gray se encontraba inconsciente en el piso de la camioneta policial, “pero no hizo nada”.
Gray murió el 19 de abril a causa de lesiones en la columna vertebral, una semana después de ser arrestado
Luego de su funeral se desataron violentas protestas en Baltimore que motivaron la movilización de la Guardia Nacional y la implementación del toque de queda nocturno.
El anuncio de Mosby fue recibido con gritos de júbilo y ruido de bocinas por manifestantes que acompañaban la conferencia de prensa en una plaza frente a la sede municipal, que en los últimos días fue el escenario principal de las protestas.
La mayoría de los habitantes de Baltimore esperaba que Mosby anunciara que el caso seguía bajo investigación, ya que el jefe de la policía, Anthony Batts, había presentado su informe apenas la víspera.
Dexter Dillard, de 47 años, dijo a la AFP que “ya era tiempo que esto ocurra” e incluso sugirió que la fiscal debería ser la próxima alcaldesa.
En tanto, Chris Taylor, de 39 años, apuntó que las declaraciones de Mosby significan que Baltimore finalmente reconoció que convive con el problema de la brutalidad policial.
Gray se convirtió en el más reciente capítulo de un intenso debate nacional sobre alegaciones de brutalidad policial contra ciudadanos negros, especialmente jóvenes.