Un equipo integrado por 26 policías irrumpió anoche en un estacionamiento próximo a la favela Tiquatira, en el este de la ciudad, tras haber recibido una denuncia anónima que precisaba que elementos supuestamente vinculados al PCC, una banda dedicada al tráfico de drogas, el robo de cargas y otros delitos, estaban reunidos en ese lugar.
Según el jefe policial Marcelo Gonzales, citado por la Agencia Estado, los sospechosos estaban diseñando un plan para rescatar a un preso que iba a ser transferido de un centro de detención a una cárcel en Sao Paulo.
De acuerdo con su relato, después de que irrumpieran en el lugar los sospechosos abrieron fuego contra los agentes.
El tiroteo se saldó con la muerte de seis supuestos miembros del PCC y los arrestos de dos mujeres y un hombre que no opusieron resistencia, mientras cinco sospechosos consiguieron huir.
Los agentes, que no sufrieron heridas, se incautaron de tres vehículos, 3.000 reales en efectivo (unos 1.570 dólares), un alijo compuesto de marihuana y cocaína y un arsenal de armas, entre ellas algunas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
El PCC, la principal organización criminal del estado de Sao Paulo, se dedica al tráfico de armas y drogas y, según la Policía, dispone de bases en la frontera con Paraguay.