Cargando...
La medida ya había sido adoptada días atrás en los municipios de Iguala y Cocula, en el estado de Guerrero, cuyos agentes fueron acusados de dar muerte a seis personas, tres de ellas estudiantes de la Escuela Normal para Maestros de Ayotzinapa, un episodio que precedió al secuestro de los jóvenes, cuyo paradero todavía es una incógnita.
Las acciones para asumir las riendas de la seguridad tienen lugar en localidades de las regiones de Tierra Caliente y norte de Guerrero, como Apaxtla, Arcelia, Buenavista de Cuéllar, Coyuca de Catalán, General Canuto A. Nerie e Ixcateopan. Otros municipios intervenidos son: Pungarabato, Pilcaya, San Miguel Totolapan, Taxco, Tlapehuala y Teloloapan en Guerrero, así como Ixtapan de la Sal, sur del Estado de México.
En total, las autoridades federales indicaron que fueron cesados unos 1.500 agentes municipales al igual que sus mandos. Según los reportes preliminares de la investigación sobre los desaparecidos, al menos 22 policías municipales de Iguala y una decena del vecino de Cocula pertenecían a la organización denominada “Guerreros Unidos”, que mantiene una guerra a muerte con la banda Los Rojos.