Al mismo tiempo avanzan sus conversaciones sobre un tratado de libre comercio con la Unión Europea.
“Buenos Aires acogerá la primera ronda (de las negociaciones para un acuerdo comercial) en junio”, indicó a la AFP un portavoz de la Asociación Europea de Libre Comercio, bloque conocido también como EFTA y que agrupa a Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza.
Este anuncio se produce un día después que Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay ultimaran en Bruselas con representantes del ejecutivo comunitario los preparativos para la próxima ronda de negociaciones sobre al acuerdo con la UE, que tendrá lugar también en la capital argentina en marzo.
La negociación comercial con los países de la EFTA la “miramos con optimismo, como parte de la apertura del Mercosur” , indicó una fuente del bloque sudamericano, que precisó que la primera ronda “formal” en Buenos Aires en junio se celebrará a nivel de jefes negociadores.
El encuentro en Bruselas, donde se cerró “el marco de las negociaciones”, estuvo presidido por el argentino Guillermo Daniel Raimondi en nombre del Mercosur y por el noruego Sveinung Roren, en representación del bloque europeo, indicó en un comunicado la EFTA.
Además de fijar la segunda ronda en agosto, según esta fuente, ambos bloques se pusieron de acuerdo en “el intercambio de la información necesaria” de cara al inicio de las conversaciones formales, como “nomenclatura, estadística o legislación sobre política comercial”, precisó la fuente sudamericana.
Ambos bloques habían acordado en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza) a mediados de enero empezar a negociar un acuerdo de libre comercio, tras un período de encuentros exploratorios desde 2015. Ese mismo año, el comercio entre ambos bloques superó los 8.700 millones de dólares, según datos de la EFTA.
Mercosur aprovechó sus conversaciones a nivel técnico con la UE, previstas entre el lunes y el jueves en Bruselas para preparar la ronda prevista en marzo en Argentina, para encontrar a los representantes de la EFTA, explicó a la AFP una fuente conocedora de las negociaciones.
Respecto al tratado de libre comercio con la UE, una fuente de la Comisión Europea explicó que “varios grupos se han reunido a nivel técnico en Bruselas esta semana para seguir avanzando en la negociación de textos”, después que en octubre acordaran “intensificar el trabajo técnico”.
En concreto, se discutieron cuestiones sobre medidas sanitarias y fitosanitarias, así como compras públicas y servicios, explicó la fuente sudamericana, para quien “el proceso está en marcha y con buen pie”.
“Existe un compromiso muy fuerte por ambas partes sobre que esta vez sí podemos cerrar el acuerdo”, añadió este fuente en referencia al fracaso de 2004, que paralizó las conversaciones iniciadas en 1999 hasta su reanudación en 2010.
Para evitar el fracaso de 2004 y consolidar la reanudación de las negociaciones de este espacio de libre comercio de 760 millones de personas, ambos bloques dejaron de lado en el intercambio de ofertas de mayo pasado productos sensibles, como la carne bovina o el etanol, que tendrá lugar más adelante.
Francia, que celebra elecciones legislativas y presidenciales en el primer semestre de 2017, ya expresó sus temores por el impacto en su sector agrícola de un eventual acuerdo con Mercosur, por lo que se decidió posponer la negociación de los productos sensibles hasta que pasen los comicios.
Entre 2004 y 2017, el contexto internacional ha cambiado sin embargo con la llegada a la Casa Blanca del proteccionista Donald Trump, que empujó a los 28 a acelerar sus diferentes acuerdos comerciales, como el del Mercosur o la modernización del tratado vigente con México.
“Yo ahora tengo una prioridad, que espero que la compartan todos, que es hacer el tratado con el Mercosur”, dijo el jueves en una entrevista con la AFP el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy.