“Acabamos de enterarnos de la muerte de un bebé, hijo de un ex combatiente (...) Rechazamos todos los actos de violencia contra nuestros compañeros y repudiamos la muerte de este pequeño” , escribió este domingo en Twitter Victoria Sandino, senadora del otrora grupo insurgente. El padre del menor se encuentra estable tras haber recibido atención médica, pero la madre “aún está en el quirófano” , agregó.
La familia vivía en una zona especial del norte de país, dispuesta para la reincorporación de los excombatientes tras la firma del histórico pacto de paz suscrito en 2016 entre el gobierno del Nobel de Paz Juan Manuel Santos y la entonces guerrilla. Según el congresista del ahora partido FARC, Benedicto González, el niño se llamaba Samuel David González y sus padres “Carlos (Gustavo) y Sandra” .
El gobierno aún no se han pronunciado al respecto. Un total de 99 miembros de las FARC han sido asesinados en Colombia desde que se suscribió el pacto en noviembre de 2016, según el más reciente informe de la ONU. El reporte identifica como responsables al Clan del Golfo, la mayor banda narco del país, surgida de paramilitares de ultraderecha desmovilizados en 2006; la guerrilla del ELN; disidentes de las FARC, y remanentes del extinto Ejército Popular de Liberación (EPL, maoísta) que se dedican al narcotráfico.
Transformada en partido político, las FARC han denunciado reiteradamente falta de garantías de seguridad para sus integrantes. El presidente de derecha Iván Duque asumió el poder el 7 de agosto con la promesa de modificar lo acordado por su antecesor y la que fue la guerrilla más poderosa de América, por considerarlo indulgente con los rebeldes. Aunque aliviado por la firma del pacto con las FARC, Colombia vive un conflicto armado que en medio siglo ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes estatales y narcos, con saldo de ocho millones de víctimas entre muertos, desaparecidos y desplazados.