“Nueve socorristas desaparecieron cuando la tierra se hundió alrededor de ellos el jueves”, afirmó un minero que pidió el anonimato.
En el lugar, aseguró, un olor a cadáver se desprende de la mina de oro ilegal que se derrumbó el lunes en la zona de Jebel Amir, a más de 200 kilómetros al noroeste de El Fasher, la capital de Darfur Norte.
“Según un recuento realizado por los empleados de esta mina, el número de personas en su interior supera las cien”, añadió. “Ayer, aparecieron ocho cuerpos y se sigue buscando a otros”, dijo.