Según señalan hoy varias agencias de noticias iraníes, el líder supremo, la máxima figura política y religiosa del país, se refirió así a la serie declaraciones hechas en los últimos días por autoridades estadounidenses en las que indicaban que su país mantenía abierta “la opción militar” en caso de que fracasen las negociaciones que Irán y los países del Grupo 5+1 mantienen sobre el programa nuclear de Teherán.
“No es aceptable que el bando opuesto continúe amenazando de forma simultánea a las negociaciones. Negociar bajo el fantasma de una amenaza no tiene mucho sentido y la nación iraní no tolera negociar bajo la sombra de la amenaza”, dijo Jameneí en un encuentro con maestros y profesores en Teherán.
En ese sentido, el líder supremo indicó que, pese a lo que digan los estadounidenses, no son capaces de “hacer una maldita cosa” contra su país, pues, “como ya dije bajo el gobierno del anterior presidente de EEUU (George W. Bush), los tiempos de las tácticas del Salvaje Oeste ya pasaron. Irán no dejará escapar a nadie que intente agredir a su país”.
Jameneí indicó que EEUU necesita un acuerdo con Irán, al menos tanto como el Gobierno iraní, ya que Teherán pretende poner fin a las sanciones mientras que Washington necesita “dejar un legado detrás” y “reclamar el haber sido capaces de sentar a Irán en la mesa negociadora e imponerle algunas condiciones”.
En cuanto al contenido de las negociaciones entre Irán y Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania), en las que se debate tanto qué límites se impondrán al programa nuclear iraní como el fin de las sanciones que lastran la economía del país, Jameneí dijo que Irán “sabe muy bien que sus problemas económicos” no se resolverán “con el fin de las sanciones”, sino “con su propia planificación, voluntad y habilidad”.
“Por supuesto, si las sanciones son eliminadas, los problemas económicos serán más fáciles de resolver. Pero su resolución igualmente será posible si las sanciones continúan”, añadió.
Entre otras “amenazas” percibidas por Irán en los últimos días se encuentran las declaraciones que el secretario de Estado de los EEUU John Kerry hizo a medios de Israel, a los que dijo que el compromiso de su Gobierno con la seguridad israelí está demostrado por la bomba antibúnker de 13.000 kilos diseñada por su país “con la habilidad para tratar con el programa nuclear iraní”.
El pasado 2 de abril, Irán y el Grupo 5+1 anunciaron haber llegado a un principio de acuerdo para asegurar que el programa nuclear iraní no se desvíe hacia fines bélicos a cambio del fin de las sanciones.
El acuerdo deberá tener su forma definitiva antes del fin de junio, para lo cual ambas partes ya han mantenido varias reuniones para redactar el texto, la última de las cuales culminó ayer en Nueva York.