“La alimentación forzada o cualquier otro tipo de amenazas de alimentación forzada o cualquier coerción física o psicológica contra individuos que han optado por el recurso extremo de la huelga de hambre para protestar contra su detención o contra sobre sus condiciones de detención es inadmisible”, afirmó el relator sobre tortura, tratos degradantes, crueles o inhumanos, Juan Méndez.
“El deseo de los reos de no comer debe ser respetado mientras se pueda comprobar que toman esta decisión de forma voluntaria. Incluso si se afirma que es en beneficio de los detenidos, la alimentación forzada bajo amenazas o coerción se considera un tratamiento inhumano y degradante”, agregó Méndez.
La modificación de la ley israelí -que seguramente se votará el próximo lunes- permitirá que se alimente forzosamente a presos siempre y cuando un médico certifique que de lo contrario existe el riesgo de fallecimiento.
Cientos de prisioneros palestinos están en huelga de hambre desde hace varias meses en protesta por la decisión de Israel de mantenerlos bajo detención administrativa, una figura por la que el Gobierno israelí puede retenerlos durante meses e incluso años sin presentar formalmente cargos ni concederles el derecho a ser juzgados.
La modificación también obligará a los doctores que se niegan a llevar a cabo la alimentación forzada a identificar a un colega que sí lo quiera hacer.
“Esto provocará que los doctores estén obligados a actuar de forma contraria a su código profesional y de ética”, reza el comunicado.
“El personal médico no debe ejercer presión sobre individuos que han decidido llevar a cabo una huelga de hambre. Los derechos de los prisioneros a controlar su salud y su cuerpo, y a no obtener ningún tratamiento al que no hayan accedido, es un elemento fundamental del derecho a la salud, que debe ser respetado y protegido”, afirmó Anand Grover, relator sobre el derecho a la Salud.
Ambos relatores urgieron a las autoridades israelíes a que cesen con la práctica de la detención administrativa, fuente primigenia de la huelga de los reos.