El tribunal dio la razón a una pareja de universitarios de Londres, Rebecca Steinfeld, de 37 años, y Charles Keidan, de 41, a quienes la administración rechazó su demanda de registrarse como pareja.
Los responsables del registro civil argumentaron que la ley de unión civil de 2004 estaba reservada a las parejas homosexuales. Pero la pareja, considerando ser víctima de discriminación, llevó el caso ante la justicia, primero al alto tribunal de Londres, en 2016, y luego, en apelación, al tribunal supremo.
“Es una victoria del amor y de la igualdad”, dijo en un comunicado Peter Tatchell, uno de los principales militantes británicos por los derechos de los homosexuales. “Nunca fue justo rechazar a las parejas heterosexuales la opción de la unión civil. En una democracia, todos deberíamos ser iguales ante la ley”, añadió.