Japón reinicia primer reactor nuclear más de cuatro años después de Fukushima

TOKIO. Japón relanzó este martes el primer reactor nuclear desde el cierre total de las centrales decidido a raíz del desastre de Fukushima en 2011, en una polémica apuesta del gobierno por volver a esta fuente energética barata.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2061

El accidente de Fukushima, causado por el tsunami del 11 de marzo de 2011, había provocado el cierre de todas las centrales nucleares del país en septiembre de 2013.

“El reactor número 1 de la central de Sendai (a 1.000 kilómetros al suroeste de Tokio) se reinició a las 10:30 (21:30 del lunes en Paraguay)”, anunció a la AFP una portavoz de la compañía operadora Kyushu Electric Power.

El reactor, de 31 años, debería alcanzar su capacidad operativa plena alrededor de las 23:00 (10:00 en Paraguay) y comenzar el viernes a generar electricidad, que será explotada comercialmente a principios de septiembre, según la compañía.

El primer ministro japonés, el pronuclear Shinzo Abe, declaró el lunes por la noche que deseaba el reinicio del reactor con la adopción de todas las medidas de seguridad, que “deben ser la primera prioridad”.

El gobierno conservador abogaba por reactivar el sector nuclear por cuestiones económicas, entre otras, visto el costo de la energía importada. Japón ha registrado desde 2011 importantes déficit comerciales, en gran parte a causa del aumento de la factura de los hidrocarburos importados para alimentar las centrales térmicas.

El equipo de Abe argumenta también que las empresas frenan su actividad y que el uso intensivo de las centrales térmicas impide adoptar objetivos ambiciosos con respecto a las emisiones de CO2 y otros gases de efecto invernadero.

El gobierno quiere que la energía nuclear genere el 22% de la electricidad en Japón para 2030, un porcentaje menor que antes de Fukushima. “Esto contribuirá a una alimentación estable”, celebró por su parte el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Japón, Akio Mimura.

Japón contaba con 54 reactores explotables antes de la destrucción de seis unidades de la central de Fukushima. De los 48 restantes, al menos cinco deben ser desmantelados.

Frente a la decisión gubernamental, una mayoría de la población cuestiona la pertinencia de esta reactivación calificada de “error” por Naoto Kan, primer ministro en el momento del accidente de Fukushima.

Unas 200 personas procedentes de varias regiones de Japón con plantas nucleares, y entre las que se encontraba Kan, protestaron frente a las puertas de la central de Sendai al grito de: “Contra las reactivaciones”, según la cadena pública NHK.

El martes por la noche está prevista otra manifestación frente a la residencia del primer ministro en Tokio.

El reactor en cuestión, que inicialmente comenzó a funcionar en julio de 1984, fue apagado el 10 de mayo de 2011 para su ciclo de mantenimiento regular, que dura entre tres y cuatro meses. No obstante, no fue reactivado debido a la decisión de las autoridades de instaurar normas de seguridad más severas tras el desastre en la central de Fukushima de marzo de 2011, consecutivo al maremoto.

El país ha adoptado estrictas medidas de seguridad para evitar una repetición del accidente, incluidas mayores medidas de prevención y la construcción de muros antitsunami más altos en ciertas áreas.

“Es importante reiniciar los reactores uno a uno desde la perspectiva de la seguridad energética, la economía y como medida contra el calentamiento global, pero la seguridad siempre va primero”, aseguró el ministro de Industria, Yoichi Miyazawa.

El refuerzo de las medidas de seguridad es clave en la apuesta de Abe por recuperar la actividad de cuatro docenas de reactores.

Varios reactores más ya han recibido la luz verde en materia de seguridad, pero las líneas rojas las trazan las comunidades locales, fuertemente contrarias al reinicio de los reactores en sus localidades.

“Abe no está escuchando la voz del pueblo, actúa como si tuviera un cheque en blanco”, se quejó Takashi Kato, profesor emérito de la Universidad de Seikei en Tokio.

El gobierno fue duramente criticado por su estrecha relación con el operador de Fukushima, Tokyo Electric Power Co (TEPCO), acusado de incompetencia a la hora de lidiar con la crisis de 2011. El mes pasado, un comité de revisión judicial decidió que los tres principales responsables de TEPCO debían ser imputados, allanando el camino para el primer juicio penal ligado al desastre.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...