Esa persona, de la que Alfano no dio su identidad en el comunicado en el que anunció la expulsión, “había sido denunciado y esta misma mañana los agentes de la comisaría de Rímini (este) cumplieron con la expulsión con repatriación a Egipto”.
Alfano destacó que esta expulsión es una muestra de labor de “prevención” de las autoridades italianas y que con ella ascienden a 66 las ordenadas en este año.
El ministro indicó en la nota que el ciudadano egipcio, que había sido detenido por delitos comunes, había sido excarcelado recientemente y que fue identificado como “ sujeto peligroso ” en el marco de la vigilancia de presos con riesgo de radicalización.
El expulsado había lanzado en la prisión en la que se encontraba gritos a favor del EI y, concretamente, según la nota del ministerio, había dicho: “ tenemos que acabar con todos. Primero los franceses, después también los italianos ” .
“ Italia es un país de acogida pero también un país que sabe hacer respetar sus reglas y sus leyes ” , dijo en la nota el ministro, quien añadió: “ quien es un enemigo potencial nuestro no tiene posibilidad de quedarse ni un minuto más ” .
Esta expulsión se conoce después de que el martes se anunciara la de un marroquí que había sido acusado de “ manifestar su voluntad de cometer acciones terroristas ” y de viajar a Siria para unirse a los terroristas del EI.
El marroquí fue identificado como Adil Bamaarouf, de 40 años y residente en el municipio de Monselice, en la provincia de Padua (nordeste) .
El ministro explicó que era conocido por la comunidad islámica de Monselice después de una “ breve experiencia ” como imán, pero fue alejado de la misma “ por sus planteamientos fundamentalistas y antioccidentales ” .
Bamaarouf partió ayer desde el aeropuerto milanés de Malpensa con destino Casablanca.
Varios agentes del cuerpo de carabineros (policía militarizada) se personaron el martes en su domicilio y se incautaron de material informático, informaron los medios locales.
Las mismas fuentes difundieron la transcripción de algunas interceptaciones telefónicas en las que Bamaarouf señalaba su supuesta intención de “ hacer explotar la ciudad de Roma ” para vengar los ataques de la coalición internacional sobre los puntos controlados por el EI en Siria e Irak.
Según datos del ministerio del Interior italiano, durante este año un total de 74.177 personas han sido investigadas por estos hechos y se han hallado 6.000 contenidos en páginas web sobre propaganda yihadista.