Cerca de 1.000 personas, entre policías y voluntarios, participan en la misión a medida que se desvanecen las esperanzas de encontrar a algún superviviente de la tragedia.
El terreno, que continúa fangoso, dificulta el trabajo de retirada de escombros y lodo, señaló en un comunicado la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres.
Según indicaron las autoridades locales, el alud se produjo por las fuertes precipitaciones registradas en la región durante los últimos días.
Cada año mueren centenares de personas a causa de este tipo de accidentes que son más habituales durante la estación lluviosa en Indonesia, entre los meses de noviembre y marzo.
“Los datos señalan que 248 personas han muerto debido a avalanchas durante este año”, señaló en un comunicado el portavoz de la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres de Indonesia, Sutopo Purwo Nugroho, según el diario Jakarta Post.