El portavoz de la Fiscalía, Carlos Vallecillo, dijo escuetamente a Efe que la incineración del “cargamento de pseudoefedrina”, que se utiliza para elaborar drogas sintéticas, fue ordenada por un juez.
El alijo, repartido en 344 fardos de 45 kilos cada uno, fue encontrado el 29 de noviembre pasado en la aldea Pata de Gallina, en el departamento norteño de Yoro, donde no se registraron detenciones.
El derivado, que supone el mayor decomiso del que se tenga registro en Honduras, estaba oculto en un túnel subterráneo en un área de unos 100 metros cuadrados en el que además hallaron “productos químicos, una instalación eléctrica y un transformador”, recordó Vallecillo.
El territorio hondureño es utilizado por narcotraficantes suramericanos que envían cargamentos de cocaína a Estados Unidos en avionetas y embarcaciones rápidas que navegan por el Caribe.
Las autoridades hondureñas se incautaron en 2011 de más de 22 toneladas de cocaína en varias operaciones en el Caribe y el norte, algunas de ellas en coordinación con agentes antidrogas de Estados Unidos.