En un comunicado, la ONG acusó a los rebeldes de haber colocado “de manera deliberada” minas en las zonas donde se enfrentan a las fuerzas gubernamentales del actual presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi.
HRW agregó que el uso por parte de los rebeldes de esas minas en Taiz, en el suroeste del Yemen, ha causado muchos heridos entre los civiles y ha obstaculizado la vuelta de las familias que se vieron desplazadas por los combates.
La ONG citó los datos de la Organización Nacional Contra Minas, con sede en Taiz, según los cuales al menos 18 personas murieron y otras 39 resultaron heridas por la explosión de minas entre mayo de 2015 y abril de 2016.
El director de la sección de armamento de HRW, Steve Goose, dijo en el comunicado que con el uso de esas minas los hutíes muestran una “crueldad extrema” respecto a los civiles.
El conflicto en el Yemen se ha recrudecido desde la intervención en marzo de 2015 de la coalición militar liderada por Arabia Saudí, que apoya a las tropas leales al Gobierno de Hadi, expulsado de la capital yemení, Saná, por los rebeldes en septiembre de 2014.