Las autoridades regionales aseguran que la Policía recibió la llamada de aviso a las 14:06 hora local (6:06 GMT), y que, poco después, las ambulancias trasladaron a los dieciséis menores heridos al hospital más cercano.
Tres de ellos murieron tras ser atendidos de urgencia, mientras los otros trece permanecen ingresados.
El sospechoso, apellidado Wu, ha sido detenido y se encuentra bajo disposición policial.
La citada agencia aseguró que las causas del crimen se desconocen y que ya se ha iniciado una investigación.
En la primavera de 2010, una racha de agresiones a niños en escuelas y guarderías causó una veintena de muertos y 80 heridos, la mayoría de ellos menores de edad, y abrió un debate en China sobre la seguridad de estos centros y las causas profundas de las agresiones.