La información fue brindada por el Servicio Nacional de Control del Tráfico Aéreo británico (NATS, en inglés). Tanto Heathrow como Gatwick reducirán el número de vuelos con permiso para aterrizar para que los controladores aéreos ganen confianza con un nuevo sistema digital con el que comenzará a operar el NATS, con base en Swanwick, al suroeste de Londres.
Heathrow, el aeropuerto con más tráfico de Europa, sufrirá retrasos de unos 20 minutos, al tiempo que su tráfico aéreo se verá reducido a un 80% de su capacidad los próximos diez días y a un 90% las siguientes diez jornadas. Además, el NATS ha pedido permiso para que algunos aviones aterricen un poco antes y un poco después del horario permitido, lo que afectará a las restricciones por ruido.
El director de la base del NATS en Swanwick, Jamie Hutchison, señaló que “para la mayoría de los vuelos el retraso será mínimo” y aconsejó a los pasajeros “no cambiar sus planes o trasladarse más tarde al aeropuerto”.
“Haremos todo lo posible, en colaboración con los aeropuertos y las aerolíneas, para minimizar el impacto que esto pueda tener en los viajeros”, aseguró.
Hutchison consideró que la introducción del nuevo sistema digital, conocido como EXCDS, “modernizará la forma en la que el Reino Unido controla su espacio aéreo”. Se espera que para 2030 el tráfico aéreo del país se incremente hasta los 3,1 millones de desplazamientos, 500.000 más que los registrados en 2017.