Estas máquinas de tomografía computerizada pueden ofrecer una imagen más nítida y su uso ya está extendido en hospitales. Las nuevos escáneres, capaces de hacer una radiografía 3D, permiten que el personal de seguridad pueda verificar los artículos y detectar explosivos sin necesidad de sacarlos de las bolsas.
“El Reino Unido tiene algunas de las medidas de seguridad más estrictas del mundo y somos líderes en la implementación de nuevas tecnologías para mejorar los controles de seguridad y proporcionar una mejor experiencia a los usuarios”, declaró un portavoz del Departamento de Transporte.
En el aeropuerto londinense se llevarán a cabo un “pequeño número” de pruebas con los nuevos escáneres, que durarán entre seis y doce meses, antes de tomar la decisión final sobre su uso.