GEORGETOWN. De acuerdo con un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guyana, el intento de arresto del conductor del diplomático el miércoles pasado, fue una violación de la Convención de Viena que define normas para los lazos diplomáticos entre naciones.
“El embajador se mantuvo firme delante de los oficiales que, en clara violación de la Convención de Viena, buscaban efectuar la detención y en ese proceso, una vez más en clara violación de la Convención de Viena, la policía le tomó de la ropa al embajador y le rasgó la camisa”, indicó la nota oficial.
George llamó a policías a la embajada después de que un hombre se negara a retirar su vehículo estacionado en la entrada de la sede diplomática de Guyana, se expresara de forma indecente y agrediera a un guardia de seguridad, añadió la cancillería.
Sin embargo, los dos policías enviados al lugar habrían ingresado dentro de la legación para intentar detener al conductor del embajador por una supuesta agresión al hombre denunciado.
El embajador habría alegado que no podían efectuar una detención en los locales de una embajada y que cualquier problema debía canalizarse a través del Ministerio de Asuntos Exteriores. “Los policías declararon que era territorio de Surinam y que el embajador obstaculizaba el trabajo policial”, denunció el ministerio guyanés.
Por ello, Guyana expresó preocupación por este “incidente sin precedentes” y que esperaba no se repitan estas “gruesas violaciones” de la ley internacional.
Guyana y Surinam aún deben resolver su conflicto fronterizo terrestre que se remonta a la colonización europea de ambos países.