Así informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El nuevo pacto se ha alcanzado tras los retrasos de los dos últimos días en la evacuación de civiles y combatientes de ese grupo de Duma debido a los obstáculos que ha puesto el Ejército del Islam, indicó la fuente.
El domingo Rusia y esa facción islamista lograron un pacto para la salida de los milicianos y los civiles que lo desearan de Duma, que en la práctica supone una rendición de los insurgentes. Pese a la marcha de dos tandas de evacuados ayer y el lunes, el proceso está transcurriendo lentamente y el Ejército del Islam aún no ha confirmado su aceptación del acuerdo del hace tres días.
Según el Observatorio, el nuevo arreglo, aparte de estipular la evacuación de los milicianos y civiles que quieran hacia áreas del noroeste de Siria en poder de facciones rebeldes aliadas de Turquía, establece la reconstrucción de las infraestructuras, los servicios y las instituciones en Duma.
Asimismo, recoge que las autoridades deberán emitir documentos oficiales para todos aquellos que los hayan perdido. Otro de los puntos del pacto es la regularización de la situación legal de aquellos combatientes del Ejército del Islam que opten por quedarse en la población y entreguen sus armas.
Además, se retrasará entre seis y diez meses el cumplimiento del servicio militar obligatorio para los jóvenes que tengan que hacerlo; y la policía gubernamental podrá acceder a Duma durante la fase de reconstrucción con garantías de Rusia.
Las fuerzas rusas han exigido al Ejército del Islam que anuncie su decisión final para completar la evacuación de Duma, de donde se espera que salgan un total 5.000 personas, entre civiles y guerrilleros. El nuevo pacto se ha conseguido después de que el Ejército del Islam amenazara con esparcir a sus prisioneros en jaulas en las azoteas de los edificios si los efectivos gubernamentales volvían a bombardear Duma.
El Observatorio destacó que el general Suhail Hasan, que dirige la ofensiva de las fuerzas leales al Gobierno de Damasco en Guta Oriental, ha amenazado con destruir Duma, aunque haya prisioneros del Ejército del Islam dentro, y que no parará hasta que las autoridades retomen la población entera.
Duma es el último reducto opositor que queda en Guta Oriental, donde el ejército sirio y sus aliados iniciaron una operación en febrero. Tras los avances castrenses y los acuerdos con las distintas facciones islamistas de la región, las fuerzas armadas sirias controlan el 94 % de la zona.