La fiscala a cargo de la investigación de la muerte de Nisman, Viviana Fein, admitió hoy que se encontraron borradores “con el pedido de detención de la señora presidenta”, tal y como adelantó el diario Clarín el pasado domingo, y reconoció que incurrió en un “error de interpretación” al negarlo inicialmente.
El borrador de la denuncia, según Clarín, está fechado en junio de 2014 y no figura en la demanda que finalmente presentó Nisman contra Cristina Fernández, el pasado 14 de enero, por presunto encubrimiento de los sospechosos iraníes del atentado contra una institución judía que dejó 85 muertos en 1994.
Nisman murió cuatro días después de presentar la denuncia contra la presidenta, de un tiro en la cabeza en su vivienda, en circunstancias sin aclarar. Para el Gobierno, es un “despropósito” pensar que el borrador estuvo en el cubo de basura de la casa del fiscal durante días.
“Si quieren ser benévolos, la tuvo (la denuncia) el día 14 de enero y aparece muerto el día 18, ¿cuatro días sin limpiar el departamento? Eso es un despropósito”, dijo hoy el secretario general de Presidencia, Aníbal Fernández. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró que la revelación de Clarín “forma parte de una burda operación de prensa” con el fin de “ocultar la estrategia de servicios de inteligencia que han sido desplazados”.
“Esto de ir a buscar en la basura respecto a eventuales escritos y luego esto no forma parte de lo que fue la denuncia no tiene asidero”, dijo Capitanich. “Es basura pura y sistemática”, reiteró el funcionario, que ayer lunes rompió varias páginas del diario en su comparecencia diaria ante la prensa y calificó la información de “mentira y basura”.