"Me dirijo ante ustedes para informarles que desconozco la autoridad írrita y dictatorial de Nicolás Maduro y reconozco al diputado Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela", dijo Yánez, quien aparece uniformado en el video, hecho desde un lugar desconocido.
Yánez, director de planificación estratégica del alto mando de la Aviación Bolivariana, destacado en la base aérea de La Carlota, este de Caracas, aseguró que "el 90% de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FAN) no está con el dictador, está con el pueblo de Venezuela".
"Con los acontecimientos de las últimas horas, ya la transición a la democracia es inminente, seguir ordenando a la Fuerza Armada que continúe reprimiendo a nuestro pueblo es continuar con las muertes de hambre, de enfermedades y, Dios no quiera, de combates entre nosotros mismos", advirtió.
Según el general Yánez, "compañeros demócratas" del grupo aéreo presidencial le han informado que "el dictador tiene todos los días dos aviones listos". "¡Que se vaya!", enfatizó.
"Es un golpe duro para la FANB aunque no tenga comando", dijo a la AFP la experta en asuntos militares Rocía San Miguel. Guaidó, quien este sábado encabezará una manifestación para exigir la salida del poder de Maduro, ofrece amnistía a los militares intentando quebrar el principal sostén del gobierno, la Fuerza Armada.
"Invito a todo el pueblo de Venezuela para que salga pacíficamente a la calle y defienda a nuestro presidente Juan Guaidó. A mis compañeros de armas les pido que no le den la espalda al pueblo de Venezuela, no repriman más", agregó.
La cúpula de la Fuerza Armada ha declarado en reiteradas ocasiones lealtad absoluta al presidente, pero la institución muestra fisuras. El 21 de enero, dos días antes que Guaidó se autoproclamara presidente encargado, 27 militares de la Guardia Nacional se sublevaron contra Maduro, y tras atrincherarse en un cuartel de Caracas, fueron detenidos.
Esa rebelión hizo estallar brotes de violencia, con pequeñas protestas y saqueos, que dejaron en una semana unos 40 muertos y 850 detenidos, según informes de la ONU. La ONG Control Ciudadano, que preside San Miguel, calcula que unos 180 efectivos fueron detenidos en 2018 acusados de conspirar, y unos 10.000 miembros de la Fuerza Armada pidieron la baja desde 2015.