“Si ciertos individuos se entregan a la apología del terrorismo en ciertos lugares, en asociaciones, en grupos de hecho, el proyecto de ley presentado esta mañana prevé que puedan ser disueltos. Y lo serán inmediatamente”, aseguró Hollande en una reunión de la Asociación de Alcaldes de Francia.
El presidente indicó que en ese ley, que será votada mañana por los diputados y el viernes por los senadores, se reformará el estado de emergencia, que podrá ser prolongado durante tres meses. Hollande reconoció que habrá “ciertas restricciones temporales de las libertades”, pero con el fin de “restablecerlas plenamente”.
El Ejecutivo tiene previsto tener aprobada antes de tres meses la reforma de la Constitución que le permita introducir el estado de emergencia reforzado, lo que le posibilitará disolver esos grupos que considere que hacen apología del terrorismo. El nuevo texto también permitirá retirar la nacionalidad francesa a las personas consideradas peligrosas que la tengan doble y organizar un sistema de control de los franceses que viajen a zonas yihadistas.
Hollande aseguró también ante los alcaldes que el Gobierno entregará a las policías municipales de las ciudades que lo soliciten armas de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. También contribuirá a financiar el equipamiento de los 3.900 cuerpos de guardias urbanos que hay en el país.