La Fiscalía imputó a Pérez Molina los delitos de asociación ilícita, caso especial de defraudación tributaria y cohecho pasivo, en los que habría incurrido entre el 8 de mayo de 2014 y el 16 de abril pasado, cuando fue desmantelada la red de corrupción.
Como presidente de la República, Pérez Molina “tuvo conocimiento y colaboró con la organización y recibió un porcentaje de los sobornos”, dijo el Ministerio Público (Fiscalía) en la audiencia que se celebra en el Juzgado B de Mayor Riesgo, a cargo del juez Miguel Ángel Gálvez.
El Ministerio Público aseguró que Pérez Molina incluso estaba en la red por encima del jefe operativo de la misma, Juan Carlos Monzón, el ex secretario privado de la exvicepresidenta de Guatemala Roxana Baldetti, quien renunció al cargo en mayo pasado por el caso.
Pérez Molina, un general de brigada retirado de 64 años, escuchó atento la acusación de la Fiscalía, que presentó como pruebas la interceptación de llamadas telefónicas entre los supuestos miembros de la organización.
Los tres delitos que se le imputan a Pérez Molina son los mismos por los que el Ministerio Público acusó a Baldetti, en prisión preventiva desde la semana pasada.
La audiencia de primera declaración de Pérez Molina comenzó este jueves a las 9.47 hora local (15.47 GMT) en el nivel 14 de la Torre de Tribunales.
Participan los fiscales del Ministerio Público y representantes de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) , un organismo de la ONU, que investigan el caso “ La Línea ” .