Los seres queridos de los marineros se concentraron en la Base Naval de la localidad bonaerense de Mar del Plata, adonde tenía que haber llegado el submarino si el 15 de noviembre de 2017 no hubiera sufrido la “implosión” que según la Armada provocó que quedase en el fondo del océano, a 907 metros de profundidad.
Si bien hay diferencias entre los familiares, ya que ya han surgido voces como la de Jorge Bergallo -padre de uno de los tripulantes- que prefieren que el buque, y por ende los cuerpos de los marineros, reposen en el mar, muchos son los allegados a la tripulación que exigen que lo saquen.
“Pedimos que el ARA San Juan sea reflotado. La mayor parte de los familiares lo queremos. No nos basta alguna foto. No vamos a bajar los brazos. Acá no se terminó la historia: queremos saber la verdad y no vamos a parar”, dijo durante la manifestación Luisa Rodríguez, madre de Gabriel Alfaro Rodríguez.
Poco a poco, a los manifestantes se fueron sumando vecinos y turistas de Mar del Plata. Esta mañana, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, reiteró lo que ya adelantó el sábado, pocas horas después de que la empresa estadounidense Ocean Infinity localizara los restos del submarino. “Argentina no cuenta con medios técnicos para rescatar o reflotar el submarino, y no debe haber en el mundo ninguna tecnología para extraer de 900 metros de profundidad una mole de 2.300 toneladas de peso”, consideró en declaraciones a radio Mitre.
Por su parte, la jueza Marta Yáñez, encargada de la causa judicial en la que se investiga lo que le ocurrió al sumergible, señaló que supedita la decisión de reflotarlo al Gobierno. “Llegado el punto de reflotamiento por una cuestión de sentimientos y susceptibilidades de quienes son las víctimas de la tragedia, eso será resorte y quedará en manos del Poder Ejecutivo”, transmitió Yáñez, que destacó que Ocean Infinity le va a facilitar 67.000 fotografías y registros fílmicos del barco, con los que podrá avanzar en la causa.