Así lo estimó la ministra ante la Comisión Segunda del Senado, al reiterar la posibilidad de que Colombia decida retirarse del Pacto de Bogotá de 1948, por el cual se reconoce la jurisdicción del principal órgano judicial de las Naciones Unidas.
“Cuando (la Corte) le da la respuesta de por qué no acoge la solicitud (nicaragüense) sobre las 200 millas en la plataforma continental, no le da respuesta de por qué no ha lugar, le dice es que por unos temas de forma que usted Nicaragua no completó”, expuso.
Para Holguín “ eso quiere decir que la posibilidad de que Nicaragua se venga en una demanda posterior buscando la plataforma continental extendida es muy grande, y por eso definitivamente tenemos que actuar ” con medidas como la de dejar de reconocer el tribunal de La Haya.
Por eso enfatizó: “la posibilidad de que Nicaragua demande a Colombia y reclame el archipiélago de San Andrés está abierta”.
La ministra explicó que cuando se abandona este tribunal, ninguna de las demandas que algún país pudiera interponer contra Colombia tendría efecto.
En el fallo, la CIJ le otorgó a Colombia siete cayos pertenecientes al archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, en el Caribe; mientras que a Nicaragua le dio dos tercios de un territorio marítimo tradicionalmente colombiano ubicado en un área rica en pesca y recursos naturales.
Colombia tiene otro litigio abierto en La Haya con Ecuador por las fumigaciones con glifosato sobre cultivos ilegales ubicados en su frontera, como recordó la canciller, pero si sale del Pacto de Bogotá “la Corte no podrá recibir ese caso”.
Por último, Holguín pidió a los demás países firmantes del pacto que evalúen si los fallos que emite la CIJ son correctos o no.
La decisión que emitió el tribunal de La Haya es definitiva e inapelable, pero los países pueden pedir una revisión o una aclaración del fallo.