El tribunal electoral aún no declara un ganador.
“Vencimos en la primera vuelta y ahora hemos vuelto a triunfar en esta segunda vuelta”, exclamó el candidato del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda), en una plaza del oeste de San Salvador, ante miles de seguidores.
Sánchez Cerén, un maestro de 69 años y excomandante guerrillero, aseguró que los resultados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que le otorgan 50,11% frente a 49,89% de Quijano, “plantean una tendencia que ya no se puede modificar”, aunque su rival no reconoce una derrota y denunció un “fraude” en ciernes.
El exrebelde obtuvo apenas 6.448 votos sobre Quijano, candidato de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha), escrutadas 99,95% de las actas electorales, un final de fotografía totalmente sorpresivo pues todos los sondeos daban a la izquierda un amplio favoritismo.
“Tenemos que hacer que en El Salvador se respeten la voluntad del pueblo (...). Vamos a gobernar creando un gran diálogo nacional” con empresarios, políticos y otros sectores, manifestó Sánchez Cerén, mientras sus seguidores coreaban: “Sí se pudo, sí se pudo” y “el pueblo unido jamás será vencido”.
Entre el bullicio de los fuegos artificiales, Sánchez Cerén pidió a la oposición aceptar los resultados y le lanzó un mensaje de conciliación: “Desde ya les decimos que tienen las puertas abiertas para trabajar con nosotros para sacar adelante a El Salvador”, subrayó.
Más temprano y ante cientos de seguidores, Quijano, alcalde capitalino de 67 años, afirmó que ganó las elecciones y que no permitirá “fraudes al estilo chavista o (Nicolás) Maduro como Venezuela” .
El presidente del TSE, Eugenio Chicas, pidió esperar al escrutinio definitivo, un conteo manual de las actas que comenzaría el lunes y podría tardar tres días, para proclamar un ganador.