“El emperador expresará su sentir sobre sus funciones en tanto que símbolo” de la nación en una alocución difundida a las 15:00 (02:00 hora paraguaya), declaró un portavoz a la AFP. Según la constitución vigente desde la Segunda Guerra Mundial, el emperador tiene “funciones de representación del Estado” y es el “símbolo de la nación y la unidad del pueblo”.
Esta será la segunda vez que Akihito, de 82 años, tome la palabra públicamente en esta modalidad. La primera fue pocos días después del tsunami de 2011. Akihito, que accedió al trono en 1989 tras la muerte de su padre Hirohito, ha sufrido diversos problemas de salud en los últimos años, entre ellos un cáncer de próstata y una operación de corazón.
En virtud de la actual ley sobre la casa imperial, que rige el estatuto jurídico del emperador, no hay previsto un mecanismo legal de abdicación. Por ello, será necesaria una revisión del texto, lo que podría implicar varios años hasta que su voluntad pueda ser cumplida. La familia imperial goza de un profundo respeto entre los japoneses. Las polémicas sobre sus miembros son prácticamente tabú en el país.